Sobre el autotratamiento y la integración de Reiki en nuestras vidas

Es importante tras recibir la iniciación en Reiki practicar los autotratamientos, tras recibir la alineación se cumple la premisa “donde hay luz no puede haber oscuridad”. Quizá surjan cosas que tengamos pendientes de resolución, algún problema abandonado, alguna situación que nos ha causado sufrimiento largo tiempo y a la que ya estamos acostumbrados creando una comodidad insana “más vale malo conocido que bueno por conocer”. Cualquier cosa puede surgir dependiendo de la persona o no surgir nada, o por lo menos que no seamos conscientes de ello.

Cuando se recibe la sintonización se obtiene una gran cantidad de energía que durante un tiempo el cuerpo va integrando, es durante este tiempo que pueden ir surgiendo estos “fantasmas” que necesitan sanación, a este tiempo dentro del Reiki se le llama periodo de purificación. Algunos lo llaman los 21 días de purificación, quizá porque son 21 días que el subconsciente tarda en integrar los nuevos cambios.

La importancia del autotratamiento entero está en que al recibir todo el organismo la energía que necesita, se evitan malestares que de otra forma nos causarían un sufrimiento innecesario por la remoción de aquellos bloqueos que arrastramos, si nuestra energía está fuerte podemos llevarlo muchísimo mejor y el cuerpo drena estos bloqueos suavemente.

Una vez la energía se ha integrado en nosotros las sensaciones características tras la iniciación, focos de calor en distintas partes del cuerpo, movimientos musculares, hormigueo, vibración, sensación de presión, desaparecerá.

Muchas personas comentan si por ello han perdido la capacidad de canalizar Reiki. “Si no siento nada es que ya no canalizo”, error. Sólo significa que el cuerpo se ha adaptado a la nueva frecuencia, la capacidad es permanente sólo que no percibimos la energía igual que no sentimos la sangre fluir por las venas. Es la práctica asidua la que nos sensibiliza desarrollando esta facultad de “percibir”, por otra parte cada persona desarrolla naturalmente esta habilidad de una forma, unos cinestésicamente, otros más intuitivamente, algunos como certezas, etc…

Es importante también dejarse llevar, si queremos controlar lo que hacemos en la práctica no disfrutaremos. La intención es valiosa como activación, tengo un problema x me doy Reiki y dejo de controlar, confío en él y sólo me convierto en observador. La energía acudirá por si misma donde hace falta, equilibrará y armonizará y veré naturalmente la consecuencia reflejada en mi interior y exterior. Si me empeñó en dirigir el Reiki, se cumple otra permisa taoista “la energía va donde le dice la mente”, si la mente está equilibrada y alineada con la voluntad divina, perfecto, si no lo está la energía fluye hacia donde le decimos o pensamos más no significa que sea lo mejor para nosotros. El Reiki respeta el libre albedrío, nos ayudará a encontrar la paz interior necesaria para que aflojemos y le permitamos ayudarnos de la mejor forma, hasta entonces nos apoyará pero las verdaderas mejoras llegarán cuando soltemos y le dejemos actuar. Supone todo un reto para nuestro ego porque quiere ser él el que provoque la sanación, sentirse satisfecho por lo que hace, “¡esto lo he hecho yo!”.
Reiki también nos ayuda a ver los “yoes”.

Pensamos que Reiki es una herramienta para la sanación, pero es mucho más que eso, es un camino de transformación interna y su consecuencia es la sanación integral, la sanación verdadera viene de la transformación interna. Reiki es un camino hacia la iluminación, es decir, hacia la paz total de la mente, no es una simple herramienta, es algo Vivo. A veces un problema es “pensar” que sólo es una herramienta, si lo pensamos así no veremos el potencial ni lo ilimitado de su alcance.

En mi experiencia y en mi caso, el mayor avance y la mayor conexión han venido cuando he soltado completamente, en esos momentos he sentido el Universo y ves lo ilimitado, la infinitud y el poder que se le han dado a nuestras manos. Hace tiempo alguien me lo dijo y le doy la razón: “nunca llegarás a comprender realmente lo que tienes en tus manos”. Todos lo tienen.

©Rita Páez  – http://ReikiEnCastellon.com

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